Creemos que cada joven tiene el potencial de convertirse en un líder de carácter extraordinario.
Somos la organización líder basada en principios atemporales, comprometida con formar e inspirar el liderazgo, el trabajo en equipo y el networking entre jóvenes de 12 a 21 años.
Nos esforzamos no solo por formar líderes, sino líderes extraordinarios con carácter.
DeMolay es la organización internacional líder en formación de jóvenes, ayudándolos a convertirse en líderes con valores y carácter.
Asumiendo valores atemporales y aceptando el desafío y compromiso del liderazgo con el ejemplo y acción, los jóvenes de DeMolay se convierten en ciudadanos ejemplares.
Con miles de miembros en todo el mundo, nuestro enfoque es simple: dar las herramientas y guía para liderazgo y éxito.
Los propios miembros son quienes toman el control de su experiencia. Desde planificar eventos, coordinar actividades y llevar sus proyectos a cabo, cada DeMolay es responsable de construir su propio éxito.
En la Orden DeMolay enseñamos siete virtudes cardinales que forman la base de un buen carácter.
Somos una verdadera hermandad sin fronteras, con miembros en cada rincón del mundo.
Cientos de miles de miembros, consejeros, DeMolay Alumni (ex DeMolay) y simpatizantes forman parte de esta fraternidad en todo el mundo, teniendo su sede central y Congreso Internacional, cuyo miembros de DeMolay Paraguay asisten cada año para confraternizar con hermanos de todo el mundo, en Estados Unidos.
Uno de los grandes valores que enseña DeMolay es el amor filial.
Los miembros de DeMolay valoran profundamente a sus padres y llevan consigo las enseñanzas de su familia. Se esfuerzan por devolver ese amor y cuidado a través de la bondad, el respeto y la cortesía.
En DeMolay alentamos a nuestros miembros a vivir según sus principios espirituales, respetando al mismo tiempo las creencias de los demás, por diferentes que sean.
Un DeMolay es amable y cortés con los demás. No solo en público, sino también en su hogar y con sus amigos.
El compañerismo une a nuestros miembros en una hermandad para toda la vida. Ser amigo es un gran honor, pero ser hermano implica lazos profundos de lealtad y confianza.
La fidelidad significa ser leal y cumplir con todos nuestros compromisos en la vida. Al ser fieles, nuestros miembros ganan el respeto y la confianza de quienes los rodean.
La pureza implica cuidar nuestras palabras, actuar con intención y mantener pensamientos respetuosos y rectos.
DeMolay alienta a cada miembro a ser patriota y valorar a quienes sirven para proteger su país, ya sea mediante el servicio o siendo un ciudadano ejemplar.
